Si la bicicleta es tu medio de transporte en la ciudad, esto te interesa. Me ha tocado ver infinidad de bicis amarradas de maneras tan accesibles para los ladrones que creo que falta mucha información en cómo candadear las bicis.
Desafortunadamente los ladrones son profesionales porque se dedican a esto y en ocasiones pueden ir uno o varios pasos adelante a la hora de proteger nuestro más preciado tesoro.
Si vives en una ciudad grande y te mueves en bici, el primer consejo es: no traigas una bici de marca tan comercial o codiciada (entiéndase Trek, Specialized, etc.). Sí, es triste, pero es la realidad, son las más robadas estando amarradas o no (como comúnmente se dice “te bajan de la bici y te la quitan”). Son muy buenas bicicletas pero yo no las recomendaría para el día a día y dejarlas amarradas en cualquier lugar y por un tiempo considerable; depende de la zona donde vivas o te muevas (aunque eso, muchas veces no tiene mucho que ver ya que si alguien le puso la mira a una bicicleta de “marca” irá a donde esté sin importar la zona).
El segundo consejo es: no escatimes en el candado. Sí, son caros, principalmente los de las marcas alemanas o americanas. Pero a la hora de que el ladrón vea una bici sujetada con un candado de gama alta o seguridad tope y un cable de acero… ¿Cuál crees que será su decisión?
Tercer consejo básico: aprende a amarrar la bici y donde la sujetes, asegúrate que esté diseñado para estacionar bicis o que no se quite fácilmente. A veces por muchos factores como por ejemplo que llegas agitado por el ejercicio, traes el casco y otros artilugios, o estás cuidando los alrededores, por error, falta de pericia y práctica no se amarra bien la bici.
De nada va a servir traer un súper candado “tope de gama” si la sujeción es nula.
También considera dejar tu bici en un lugar que no estorbe el paso peatonal, bloqueé una entrada o por sentido común no sea el lugar adecuado para dejarla porque alguien puede volar tu candado, sin necesidad de robarla, dejarla simplemente arrumbada en la calle y se la pueden llevar.
A la hora de amarrar tu bici en la calle, de preferencia elije un lugar concurrido y con mucho movimiento. Es mejor así que un lugar escondido, sin presencia de testigos. También puede servir que haya cámaras de vigilancia para asustar al ladrón, pero no te confíes. Yo en lo personal, trato de dejarla por ejemplo en la entrada de un supermercado (claro, que no estorbe el paso peatonal). Otra cosa que también me sirve es, además de amarrarla bien con un buen candado, decirle a un cuida-coches, un “poli” de servicio privado o vigilante de estacionamiento “que le eche un ojo”; al final le puedes dar unos pesitos que no le caerán nada mal a él por el “servicio”; sí, definitivamente, es un gasto pero dime cuánto te va a costar comprar una bici nueva o usada, y toda la perdedera de tiempo que eso implica.
Si hay más bicicletas es mejor pues si el ladrón va por una bici tendrá para escoger y se llevará la que tenga el candado más débil.
No des pistas obvias de cuánto tiempo te vas a tardar, por ejemplo: si vas al cine en tu bici y eres lo bastante obvio para dejarla en la mera entrada y luego entrar al cine, lo que pensará el ladrón es que tendrá alrededor de una hora y media para robar tu bici.
Si la dejas en un estacionamiento compartido (llámese: el estacionamiento de los departamentos donde vives, déjala con candado; si no hay un bici-estacionamiento mejor déjala dentro de tu casa o propón que se haga uno).
El candado trata de que no esté pegado al suelo. ¿Por qué? Porque será presa fácil para los martillazos en la cerradura o para que hagan palanca con el piso.
Yo por lo regular cargo con dos candados. ¿Por qué? Porque dos es mejor que uno. Sí y te explico por qué. Primero, hay dos tipos de ladrones: el de ocasión (vio la oportunidad y se le hizo fácil) y el que ya tiene un objetivo y un plan (buscaba una Giant de montaña, la detectó, la siguió, fue por ella y se la llevó). El ladrón de ocasión lo puedes eliminar dejando bien segura tu bici con doble candado ya que no verá la “oportunidad” y no se le hará fácil. El segundo no lo eliminarás al 100% porque trae un objetivo pero la pensará 2 veces al ver bastante segura tu bicicleta y puede que desista; a éste último ponle más obstáculos para que se vaya por otro objetivo (desgraciadamente pero que mejor no lloren en tu casa) como por ejemplo: ponla en un lugar muy transitado, de bajo riesgo, donde haya cámaras, bien amarrada, con doble candado, en un rack seguro, etcétera.
Por último, mantente informado de cuáles son las zonas rojas de tu ciudad ya sea con tu grupo de amigos, conocidos o en redes sociales. En las pláticas entre ciclistas siempre sale el comentario. Si ya sabes que la zona “x” casi siempre se las roban o es conocida por eso, trata en la manera de lo posible evitar esa zona. Es complicado pero también puede ayudar a estar alerta, hacer el viaje a esa zona pero dejarla más que segura y no tardarte si es posible para ti.
Estos son algunos consejos que hasta el momento me han servido. Si tú sabes de otros o tienes comentarios al respecto, hazlo saber en los comentarios.
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